12 Matanza

El Matatxerri era todo un acontecimiento. Solían avisar a tres o cuatro vecinos para que fueran y era el padre el que mataba, no solo en casa sino también a otros vecinos. Ese día se preparaba bacalada. Tras matar, llevaban una muestra al veterinario aunque el padre ya solía saber si el animal estaba sano o no. El almuerzo era suave, a base de pan blanco y anís, porque había que seguir trabajando y por la noche era cuando se celebraba la cena fuerte. De los presentes se encargaban ellos, generalmente a tíos y vecinos que hacían lo propio cuando les tocaba matar a ellos.

secuencias de José Antonio Ereño Elorri